29 noviembre 2009

Los Viajes de la Muerte (1)



1 (la elección)

Sentada en el tren viaja la muerte
con esa elegancia ancestral que la caracteriza
va escudriñando el aroma que desprende esa pareja de enamorados
que están en pleno beso
-la muerte cierra los ojos y absorbe el aire-
( ( ( u u u h h h h h . . . . . . . ) ) ) dice la muerte entre paréntesis
dos hombres con cara de amargados
discuten un viejo problema financiero
-la muerte sonríe-
una pareja de ancianos se toma de las manos sospechando el final
-la muerte bosteza-
un hombre se rasca la cabeza no muy fuerte pero
sus dedos se manchan de sangre
-la muerte está a punto de soltar una carcajada pero se contiene-
una mujer de mirada perdida piensa en la boda de su hija
y una imagen de profundo dolor invade su mente
-la muerte camina por el pasillo sin decidirse-
otra mujer joven se queda dormida y sueña que es abuela
y que nadie la llamará jamás para su cumpleaños
-la muerte acaricia su pelo y a la mujer le brota un puñado de canas-
un joven que escucha su música a solas
cierra los ojos y viaja por las profundas grietas de una pequeña tabla
que lleva escondida en su bolsillo
-la muerte exhala y un olor a madera invade el vagón-
( ( ( a a a h h h h h . . . . . . . ) ) )
un hombre despierta de golpe
después de tener un increíble sueño que no puede recordar
se ha pasado la estación, mira a todos lados
no hay nadie
a él le ha tocado
-la muerte sonríe y da el zarpazo-
el tren se ha detenido.


© Imagen de Adrián Arias
(escrito en el Bart)

3 comentarios:

  1. Martha Toledo11/30/2009

    Querido Adrian, tu poema me ha sorprendido gratamente, yo suelo sentir muy cerca cada día la presencia de la muerte. Como no me es ajena, cada noche antes de dormir le agradezco su compañía, su protección, su cariño.

    Martha Toledo

    ResponderEliminar
  2. La muerte sin duda es nuestra leal amiga o amigo?

    ResponderEliminar